La revolución del ‘slow travel’: por qué la nueva tendencia es viajar sin prisa

Escrito el 14/09/2025
Equipo NE

Mientras el turismo de masas sigue buscando la eficiencia y la rapidez, ha surgido un movimiento opuesto que gana cada vez más adeptos: el ‘slow travel’ o turismo lento. Esta filosofía de viaje, lejos de ser una moda, busca una conexión más profunda y significativa con los lugares que visitamos, dejando atrás los itinerarios apretados y la prisa por ‘verlo todo’.

El ‘slow travel’ invita a sumergirse en la cultura local. En lugar de cambiar de ciudad cada dos días, el viajero lento prefiere quedarse más tiempo en un solo lugar. Esto permite conocer a los residentes, descubrir pequeños comercios, probar la gastronomía auténtica y, en definitiva, vivir como un local. El objetivo es absorber la esencia del destino, no solo tomar una foto de su monumento más famoso.

En España, el domingo es el día ideal para abrazar esta filosofía. Aquí tienes una lista de sitios que encajan con este espíritu y son perfectos para una escapada dominical:

Escapadas de domingo para realizar slow travel:

  • Madrid y alrededores: Disfruta de la vida local en El Rastro, el mercadillo al aire libre más famoso de Madrid, o relájate en el Parque del Retiro. Para los amantes de la naturaleza, la Sierra de Guadarrama ofrece rutas de senderismo para desconectar a pocos kilómetros de la capital.
  • Cataluña: Piérdete por el tranquilo barrio de Gràcia en Barcelona para disfrutar de sus plazas y tiendas. Si prefieres la naturaleza, el Parque Natural del Montseny es una excelente opción.
  • Andalucía: Pasea por el centro histórico de Sevilla y el barrio de Triana, disfrutando de tapas. En Granada, sube al barrio del Albaicín para ver la Alhambra desde una perspectiva única.
  • Norte de España: En Bilbao, haz un «poteo» (ir de bar en bar a tomar algo) por su Casco Viejo. En San Sebastián, un paseo por la playa de La Concha o una subida al Monte Igueldo te permitirán disfrutar de la ciudad sin prisas.

Este tipo de turismo no solo beneficia al viajero, sino también a las economías locales. Al usar medios de transporte como el tren y al apoyar a los negocios de la zona, se contribuye de manera más directa al bienestar de las comunidades anfitrionas. En un mundo cada vez más rápido, el ‘slow travel’ se presenta como una forma de desconectar y de redescubrir el placer de viajar sin presiones.